El Observatorio de Equidad de Género ha registrado un total de 32 casos de feminicidios en lo que va de 2024 en Puerto Rico, lo que refleja un aumento en las muertes violentas de mujeres cuando se compara con el mismo período en 2023.

La organización no gubernamental tiene registrados 20 feminicidios bajo investigación, ocho íntimos o perpetrados en situaciones de violencia doméstica, uno familiar, dos por crimen organizado y un transfeminicidio. Sin embargo, para el cierre de abril de 2023, la cifra se posicionaba en 18 casos, informó la analista del OEG, Debora Upegui Hernández.

En cambio, la Policía de Puerto Rico registra un total de 21 asesinatos de mujeres, de los que catalogan a siete como feminicidios íntimos y uno familiar, vinculado a un caso de feminicidio íntimo.

“La mayoría de las veces, los datos de los íntimos están bastante similares a los nuestros. La diferencia de los datos de ellos es que no están incluyendo las muertes sin causa determinada, y muchos de los casos bajo investigación no los incluyen”, explicó la doctora Upegui Hernández sobre las diferencias en las cifras.

De acuerdo a la Oficina de Prensa del Cuartel General, para el 14 de abril de 2023, siete mujeres habían sido asesinadas, y de estas, cinco murieron en situaciones de violencia doméstica. Mientras, el Instituto de Estadísticas tiene, entre enero y abril de 2023, seis feminicidios íntimos y uno no íntimo.

Aunque los datos de feminicidios íntimos del gobierno y del Observatorio son similares, ambas fuentes utilizan metodologías y categorizaciones distintas, por lo que no son comparables.

Entre la noche del sábado y la madrugada del domingo, dos mujeres fueron asesinadas.

El primer incidente se reportó, en Ciales, a las 11:35 p.m. del sábado, cuando Carmen Yazaira Hernández Serpa, de 43 años y residente en Morovis, falleció tras recibir un disparo en el abdomen. En le tiroteo, también resultaron heridos un hombre y otra mujer.

Mientras, Ivette Joan Meléndez Vega, de 56 años y residente en Vega Baja, fue encontrada asesinada y semidesnuda en la carretera PR-686, cerca de la playa Los Tubos de Manatí, el domingo, a eso de las 4:29 a.m. Según un informe de la Policía, la víctima tenía una herida abierta en el cuello y en la cabeza que le provocaron la muerte en el acto.

Para la abogada Josefina Pantoja Oquendo, portavoz del Observatorio, “estamos encontrando casos donde la manera de cometer el feminicidio es bien bizarro, súperviolenta”. “Es como un ánimo de restarle toda dignidad y toda valía como persona a la mujer que es asesinada”, sostuvo.

En un tercer caso perpetrado este fin de semana, una mujer de 72 años falleció en un hospital en Toa Baja, donde el personal médico precisó que tenía una “abrasión en el área del cuello”.

Este caso no se ha catalogado como asesinato, pues esperan por las pruebas del Instituto de Ciencias Forenses para determinar la causa de la muerte. La investigación, sin embargo, se realiza conforme al protocolo de feminicidio, como se ha determinado desde la declaración del Estado de Emergencia de Violencia de Género, informaron las autoridades.

“Mientras no esté esclarecida cuál es la causa del delito, cuál es la causa del crimen, pues tenemos que tenerlo en la mira con altas sospechas. También, tenemos que mirar cuál es el grado de esclarecimiento que tiene el Negociado de la Policía con relación a los delitos, que podrá haber mejorado un poco, pero todavía deja mucho que desear”, dijo, por su parte, la licenciada Pantoja Oquendo.

Estos tres casos del fin de semana fueron incluidos en la categoría de feminicidios bajo investigación del Observatorio.

La portavoz de la entidad elevó el mensaje de la prevención para evitar las muertes violentas de mujeres. Como para muchas personas que trabajan con la violencia machista, la educación con perspectiva de género “es la mejor manera de prevenir, que la gente conozca de dónde es que surge la violencia, cuáles son los patrones”, puntualizó.

La abogada aclaró que la educación no solo se debe ofrecer en las escuelas, sino en campañas de alto alcance para entender que “la manera en que nos crían, en que nos formamos, nos conduce a la discriminación, y la discriminación va escalando hasta que puede transformarse en violencia contra las mujeres”.

“Hay que buscar la manera de continuar abundando sobre el aspecto de educación, que no es solamente en las escuelas, sino que también se puede hacer mediante divulgación pública”, enfatizó.

Pantoja Oquendo destacó que las campañas deben estar basadas en las experiencias de las potenciales víctimas y el resultado debe ser medible.

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Tanto la Policía como la Oficina de la Procuradora de las Mujeres tienen herramientas para atender, confidencialmente, cualquier señalamiento o querella sobre un patrón de abuso, maltrato o situación por violencia de género. Si atraviesas por una emergencia o incidente que requiere la intervención inmediata de las autoridades, llama al Sistema de Emergencias 9-1-1. Si eres o conoces de una persona que atraviesa un patrón similar, puedes comunicarte con la Policía al 787-792-6734 o 787-343-2020, así como con la Oficina de la Procuradora de las Mujeres al 787-722-2977.