El Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) vigila un disturbio que se formó en el golfo de Campeche en México al igual que un segundo fenómeno que se desarrolla al este de las islas Bahamas que pudiesen afectar a los Estados Unidos continentales en los próximos días.

Según un boletín especial del NHC, el primer disturbio se mueve lentamente hacia el oeste, noroeste hacia la costa occidental del Golfo y mantiene un 70% de probabilidad de desarrollo ciclónico.

Se espera que este disturbio se convierta a mitad de la semana en una depresión o tormenta tropical.

Aunque no se desarrolle, varias porciones del sur de México, al igual que otras zonas de América Central, podrían recibir fuertes aguaceros que además provocarán inundaciones peligrosas.

Asimismo, se espera que esta lluvia también llegue hacia la costa noroeste del Golfo de México afectando estados como Texas, Luisiana o Mississippi.

Por otro lado, el segundo disturbio se mantiene en un 10% de probabilidad de desarrollo en los próximos dos días y un 30% de probabilidad en los próximos siete días.

No obstante, el fenómeno mantiene un área de nubes y tormentas eléctricas al igual que una vaguada y un área de baja presión en niveles altos de la atmósfera.

Se espera que este sistema llegue a la costa sureste de los Estados Unidos a partir del jueves o viernes aunque no se específica más sobre qué condiciones dejaría sobre las áreas afectadas.

En su boletín especial de las 5:00 p.m., el NHC emitió una vigilancia de tormenta tropical para ciertas regiones de Texas y México ante la posibilidad de un potencial desarrollo.

La vigilancia para la costa de Texas se extiende desde Port O’Connor hacia el sur hasta la boca del Río Grande mientras que también está vigente para la costa noreste de México al sur de la boca del Río Grande a Boca de Catan.

Una vigilancia de tormenta tropical significa que las condiciones de tormenta tropical son posibles dentro del área de vigilancia, generalmente dentro de 48 horas.