Puerto Rico ya cuenta con su propio amaretto. Creado cuidadosamente en Papá Pedro Vinos y Rones, en las montañas de Maricao, este producto comenzó a ganarse su espacio en las cocinas y mesas boricuas en la Navidad pasada, y pronto saldrá a conquistar a la diáspora.

El amaretto es un licor dulce que se toma a temperatura ambiente o con hielo, y es reconocido por su versatilidad como digestivo después de las comidas, además de utilizarse para confeccionar postres o cócteles.

“Todos los amarettos que hay en el mercado son italianos. Nadie hace amaretto en Puerto Rico, solo yo, y aquí en Maricao”, aseguró Ricky Quiñones, propietario de Papá Pedro Rones y Vinos. “Este es mi nuevo proyecto: amaretto puertorriqueño. Y acabamos de recibir la licencia para poder exportarlo con la etiqueta de Maricao Amaretto”, anunció.

“Vamos a continuar adquiriendo equipos para seguir trabajando para mejorar la calidad de todos nuestros productos”, explicó Quiñones, quien hace todo desde su casa convertida en una destilería ubicada en la avenida Pedro Albizu Campos #15, a minutos de la plaza pública de Maricao.

Quiñones, quien es contable y también entrenador personal, se quedó sin trabajo en el 2007. Comenzó a buscar la forma de reinventarse y aprendió a hacer cervezas artesanales con vídeos en la plataforma de YouTube.

“Todo comenzó aquí en casa. Tumbé la pared del gimnasio y cambié todo para adaptarme al mercado de las cervezas y los rones. Todo el inicio fue duro porque nadie entendía lo que quería hacer”, dijo.

“Comencé todo de forma oficial en el 2014 con vinos en el sótano, en tanques pequeños. Traje los caldos de uva de Petite Sirah de California, y fue el producto principal. Era una producción pequeña en la que hacíamos cuatro cajas de vinos, 60 botellas, en ocho horas entre siete personas, y se trabajaba con un supervisor del Departamento de Hacienda”, detalló sobre los inicios de la empresa que lleva el nombre de su padre Pedro Quiñones, quien ya falleció.

“El nombre de Papá Pedro es por mi papá. Papi ya murió, pero nos queda su recuerdo en la foto que está en el producto”, indicó el empresario natural de Yauco, quien llegó a Maricao en el 2000 y se quedó.

“Cuando vi el resultado del producto me lancé con todo y, con una línea de crédito, compré todos los equipos que necesitaba hasta la encorchadora. Ahora, puedo llenar 20 cajas (240 botellas) en media hora y solo. Además, llevé la calidad del producto a otro nivel”, mencionó.

“Hace dos años obtuvimos la licencia para hacer ron blanco, y ese es el producto que se está vendiendo bien fuerte”, informó Quiñones, mientras muestra orgulloso su alambique con columnas en el que hace el preciado tesoro de 55% de alcohol por volumen que pueden conseguir en supermercados, tiendas y en el local de Hecho en Puerto Rico en Plaza las Américas.

“El proyecto nuevo son los licores y ya comencé con limón, coco y no puede faltar el de café porque estamos en Maricao”, dijo el propietario, que espera que los licores salgan al mercado este verano.

Papá Pedro Vinos y Rones está abierto de jueves a domingo, de 9:30 a.m. a 3:00 p.m., y ofrece a los visitantes una experiencia para degustar libre de costo el ron blanco, el amaretto y tres sabores de licores. Debe llamar para reservar al (787) 640-6251. Para más información, visita sus redes sociales como papa_pedro_maricao en Instagram y Papa Pedro Vinos en Facebook.