Por primera vez en la historia de la FIFA, la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol, conocida como Concacaf, podría tener hasta ocho representantes en la Copa del Mundo de 2026 que tendrá a 48 naciones batallando por el codiciado trofeo Jules Rimet.

Y dentro de la prometedora plantilla de la Selección Nacional de fútbol de Puerto Rico, no se habla del mero hecho de participar y aprovechar el moméntum traído por los jugadores que militan en España Leandro Antonetti y Jeremy De León (Real Madrid Castilla), sino que creen “se puede alcanzar” el máximo objetivo.

La tarea no es fácil, para no decir casi imposible, dado al historial deportivo de algunas de las 29 selecciones aspirantes. Puerto Rico, por su parte, nunca ha clasificado a una Copa del Mundo de fútbol. Pero ya el denominado “Huracán Azul” dio el primer paso el pasado jueves al empatar como visitante 0-0 ante El Salvador. El martes, tienen un segundo turno al bate cuando reciban (ante casa llena) en el Estadio Juan Ramón Loubriel, de Bayamón, a su similar de Anguila.

Una victoria por amplio margen en dicho partido los colocaría en el segundo puesto del Grupo F de las eliminatorias de Concacaf, en una posición favorable que, de mantener, los catapultaría a la siguiente fase.

“Creemos 100% que podemos clasificar a la Copa del Mundo”, dijo el dirigente del onceno boricua, el inglés Charlie Trout, a pregunta de El Nuevo Día durante una rueda de prensa de la Selección llevada a cabo el lunes en la noche.

“Cuando llegué a Puerto Rico (hace unos años) a integrarme con el equipo Sub-20, precisamente con Leandro (Antonetti) en esa plantilla, no sabía qué esperar en general. Pero rápido me di cuenta del talento por pulir que había acá. Tenemos jugadores jóvenes que van a tener que madurar más rápido de lo anticipado, sumado a otros veteranos. Pero podemos hacerlo”, agregó el director técnico de 39 años.

Trout asumió las riendas de la Selección en marzo de 2023 luego de la salida de Dave Sarachan, a quien también ayudaba como asistente.

Ya clasificadas al Mundial por ser anfitrionas se encuentran las selecciones Estados Unidos, México y Canadá, dejando disponibles tres boletos a disputarse en la ronda final de clasificación de la Concacaf. Adicional a eso, los dos mejores segundos lugares de dicha fase (tres grupos de cuatro países) avanzarán a un repechaje a finales de 2025, en donde podrían asegurar otras dos plazas más, elevando el total a ocho.

El panorama actual de Puerto Rico es el siguiente: después del partido ante Anguila, los boricuas no volverán a jugar hasta junio del próximo año, cuando choquen contra la líder de grupo Surinam (6 puntos/+7 diferencia de goles), así como también San Vicente y Granadinas (0 tantos/-5).

De lograr uno de los dos mejores puestos de grupos, Puerto Rico clasificará a la ronda final de Concacaf, en donde tendrá que disputar un total de seis partidos (tres en casa y tres de visitante).

“Dentro del vestuario, el feeling es que podemos estar dentro de esos ocho cupos de Concacaf. Cada uno de los jugadores de la plantilla se lo cree a muerte. Estamos motivados y emocionados con este reto. Lo demostraremos en las siguientes fases”, manifestó a este medio el capitán Juan O’Neill, quien se perderá el choque contra Anguila debido a una lesión sufrida en la pierna derecha tras recibir una dura entrada recibida en el juego contra El Salvador por el jugador Jairo Henríquez.

Antonetti, que milita en la Primera Federación, tercera categoría del fútbol español, con el Lugo, coincidió con O’Neill.

“Queremos convertir en un mito eso de que en Puerto Rico no se juega fútbol. Tenemos que conseguir los resultados. Hacerlo con el apoyo de un país entero a tus espaldas, eso es lo más bonito que me ha tocado vivir”, indicó.

Tanto el cuerpo técnico como los jugadores optaron por no opinar sobre unas declaraciones del defensor Zarek Valentín, quien sostuvo al periódico estadounidense St. Paul Pioneer Press que los futbolistas boricuas merecían mejores condiciones económicas.

El integrante del Minnesota United en la MLS aseguró en dicha entrevista que solo recibió $75 para el partido ante El Salvador. “Creo que los jugadores merecen más que eso”, sentenció.

La Federación Puertorriqueña de Fútbol (FPF) tampoco estuvo disponible para reaccionar a dichas declaraciones. Sin embargo, un portavoz (del ente federativo) señaló que no emitirían comentarios al respecto y abordarían el tema en un comunicado.