Washington D.C. - El congresista demócrata Ritchie Torres (Nueva York) presentó legislación que autorizaría y reglamentaría que el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos provea asistencia a gobiernos estatales, como Puerto Rico, para estabilizar el sistema eléctrico.

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La legislación establece que, cuando un gobierno estatal lo solicite, el secretario del Ejército debe brindar asistencia “según lo determine necesario y apropiado para estabilizar la red eléctrica”, incluida ayuda técnica, “generación temporal de electricidad, suministro de equipo o cualquier otra asistencia relevante”.

De acuerdo con el proyecto de ley, la duración de la asistencia dependerá de lo que decida el secretario en consulta con el gobierno estatal. La legislación permitiría destinar $1,000 millones para cumplir con el objetivo del estatuto.

“Evitar que cientos de miles de personas se queden sin electricidad supera el costo... Estados Unidos es la nación más rica del planeta. Tenemos las herramientas para generar la energía que Puerto Rico necesita desesperadamente. Lo que falta es la voluntad política”, indicó Torres, en entrevista con El Nuevo Día, tras someter la legislación en la tarde del miércoles.

Torres presentó el proyecto de ley en momentos en que los residentes de Puerto Rico se enfrentan continuamente a apagones y problemas en el suministro de energía eléctrica, y el proceso dirigido a rehacer la red puede tardar otros ocho años. Aunque reconoce que la medida no se convertirá en ley en el último trimestre de esta sesión 118 del Congreso, Torres dijo que busca comenzar la discusión.

El legislador federal boricua sostuvo que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés) ha dicho en el pasado que el Cuerpo de Ingenieros del Ejército adolece de autoridad estatutaria para instalar generadores de emergencia.

“El propósito de esta legislación otorga al Cuerpo de Ingenieros del Ejército la autoridad de la cual carece”, indicó, al señalar que “FEMA prometió originalmente de 600 a 700 megavatios de generación de energía, pero solo entregó la mitad”.

Aunque la legislación aplicaría a los 50 estados, Washington D.C., los cinco territorios estadounidenses y los países en libre asociación con Estados Unidos –las islas de Micronesia, Palau y Marshall–, Torres afirmó que, entre todas esas jurisdicciones, “Puerto Rico tiene la peor red eléctrica”.

El 26 de septiembre, el subcomité de Asuntos Indígenas e Insulares de la Cámara de Representantes tiene en agenda una audiencia pública que persigue examinar “la red eléctrica de Puerto Rico y la necesidad de energía confiable y resiliente”.

La legislación del demócrata Torres requiere al gobierno estatal que provea informes, “al menos mensualmente”, a los comités de Transportación e Infraestructura de la Cámara de Representantes, Energía y Recursos Naturales, y Ambiente y Obras Públicas del Senado, sobre los niveles de electricidad.

Los informes deben incluir el progreso en estabilizar la red, la necesidad de recurso adicionales, incluyendo asignaciones, y una cronología sobre el proceso para completar los trabajos.

“El Cuerpo de Ingenieros del Ejército ha construido 16 generadores en Palo Seco y San Juan. Y esos generadores producen colectivamente 350 megavatios de energía en la isla, proporcionando energía a 100,000 hogares. Por lo tanto, debemos establecer un sistema permanente para construir generadores de emergencia para los estados y territorios cuyas redes eléctricas se encuentran en estado de crisis”, dijo Torres.

El congresista demócrata también afirmó que, para lograr esta ayuda, puede ser necesaria una victoria de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, candidata demócrata a la Casa Blanca, en las elecciones de noviembre.

“Se necesita la presidencia adecuada para implementar la ley. Por lo tanto, la elección de Donald Trump sería una catástrofe para Puerto Rico. Donald Trump retrasó dramáticamente la reconstrucción y recuperación de Puerto Rico. Y una segunda presidencia de Trump causaría aún más daño. Por lo tanto, a Puerto Rico le conviene tener a Kamala Harris como presidenta en lugar de Donald Trump”, sostuvo.

Desde octubre de 2022, tras el azote de huracán Fiona, el presidente Joe Biden otorgó a la secretaria de Energía de Estados Unidos, Jennifer Granholm, la responsabilidad de supervisar la modernización de la red eléctrica, que cuenta con una asignación de cerca de $11,400 millones, a lo que se suman otros miles de millones de dólares dirigidos a su recuperación después de desastres naturales.

En junio pasado, en medio de una fuerte ronda de averías y apagones, Torres y la comisionada residente en Washington, Jenniffer González, reclamaron al gobierno federal que intervenga en la más reciente crisis de la red eléctrica de Puerto Rico y elabore un “plan integral” para estabilizarla y agilizar su modernización.