Washington D. C. - El liderato del Comité de Servicios Armados del Senado estadounidense alcanzó un acuerdo sobre el proyecto de autorización de gastos, el cual propone unos $118 millones para construcciones militares en Puerto Rico.

Las iniciativas incluyen $59.1 millones para el Fuerte Buchanan: $39 millones para barracas de un centro de entrenamiento; y $20.1 millones para un sistema de purificación de agua.

Además, se asignan $10.12 millones para un sistema de microrredes en Aguadilla.

El proyecto, además, extiende, autorizaciones previas: $37 millones para un centro de entrenamiento en el Fuerte Allen de la Guardia Nacional en Juana Díaz; y un sistema de microrredes en el Fuerte Allen ($12.19 millones).

En la Cámara de Representantes, el proyecto de autorización de gastos de Defensa incluye $63 millones para un taller de mantenimiento de vehículos de la Guardia Nacional en Gurabo.

La comisionada residente en Washington, Jenniffer González, ha indicado que las barracas de Buchanan ofrecerían alojamiento para militares que se reporten al fuerte sin acompañantes y que la asignación formal para ese proyecto es parte de la medida presupuestaria 2025 aprobada en el Comité de Asignaciones.

En total, el proyecto acordado por el presidente del Comité de Fuerzas Armadas del Senado, el demócrata Jack Reed (Rhode Island), y el republicano Roger Wicker (Misisipi), autoriza una asignación de $911,800 millones para programas militares y de seguridad nacional dentro de los departamentos de Defensa y Energía durante el año fiscal federal 2024-2025 que comienza el 1 de octubre.

La medida cameral autorizó $895,000 millones. Pero, además, contiene unas medidas que los demócratas han dicho son píldoras venenosas, como prohibir reembolsar gastos por procedimientos de aborto (excepto cuando la vida de la madre está en peligro o en casos de incesto o violación) y que las academias militares tomen en consideración la raza del solicitante.

Tradicionalmente, el contenido de esta medida se decide en un comité de conferencia entre el Senado y la Cámara de Representantes, lo que probablemente volverá a ocurrir.