Las 39 semanas de gestación permiten al bebé el tiempo necesario para desarrollarse, en esencial, sus órganos más importantes: el cerebro, los pulmones y el hígado. Por tanto, un parto prematuro es una complicación para la madre y el recién nacido. De acuerdo con el ginecólogo obstetra Alfonso Serrano, del Hospital HIMA en Fajardo, aproximadamente 13 % de los nacimientos en Puerto Rico ocurren de forma prematura, en comparación con un 10 % en Estados Unidos.

Un parto se considera prematuro cuando ocurre antes de las 37 semanas de embarazo. En términos obstétricos, se reconoce como parto prematuro tardío un parto entre las 34 a 36 semanas, mientras que un bebé prematuro nace entre las 28 y las 32 semanas de gestación, y puede presentar mayor inmadurez en todos los órganos y sistemas. El médico aclaró que, desde 1980, existen medicamentos u opciones para frenar el parto prematuro, pero, lamentó que la incidencia no ha disminuido.

Una causa específica puede ser identificable; no obstante, existen causas comunes asociadas a las complicaciones del embarazo. “En la actualidad, lo que se trata es de identificar la causa del parto prematuro para darle tratamiento, ya sean antibióticos o esteroides, y, además, cubrir al bebé con una neuroprotección, lo que ayuda a evitar las hemorragias intraventriculares en su cerebro”, explicó el doctor Serrano.

El obstetra informó que existen protocolos de atención y prevención que se activan tan pronto la mamá llega al hospital. “La idea es detener el parto prematuro por 48 horas. Se necesita ‘comprar’ tiempo para la protección y los esteroides, que son por 24 horas, tardan 48 horas en hacer efecto. Lo que se requiere es ese tiempo, luego se puede dar de alta al paciente. Si regresa, se debe medicar nuevamente para aguantar el parto, pero no le tienes que repetir los esteroides ni el magnesio”, especificó.

El ginecólogo obstetra reconoció que la primera razón —y la más importante causa para un parto prematuro— es un parto prematuro anterior. Además, entre los factores de riesgo conocidos que pueden incrementar la posibilidad de un nacimiento pretérmino, el especialista mencionó:

De igual forma, destacó que las embarazadas con diabetes descontrolada o con diabetes insulinodependientes tienen una mayor predisposición a complicaciones. Por eso, no se permite que estas pacientes lleguen más allá de las 38 semanas. Sin embargo, las que padecen de diabetes pero su condición está controlada, pueden llegar hasta las 39 semanas, siempre que lleven una dieta supervisada.

Además, resaltó que las pacientes anémicas que no se tratan por deficiencia de hierro o no consumen los alimentos necesarios pueden manifestar complicaciones que desencadenan en un parto prematuro.

“El embarazo es el momento de cuidarse y evitar las complicaciones. El promedio es de doce visitas mínimas y, dependiendo de las condiciones del paciente, se necesita un equipo multidisciplinario que incluya, por ejemplo a un dietista o endocrinólogo”, informó.

La sugerencia del ginecólogo obstetra es que la mujer que viva con diabetes, hipertensión, epilepsia o enfermedad metabólica y esté planificando un embarazo acuda a su médico antes de quedar embarazada. “Es mejor antes que después. El cuidado prenatal es bien importante, porque identifica al paciente a riesgo y evita las complicaciones del bebé. De ahí la importancia de la pastilla de cuidado prenatal que tiene hierro y ácido fólico”, sostuvo. El hierro aporta el oxígeno que requiere el bebé para crecer sano y reduce el riesgo de anemia materna, mientras que el ácido fólico previene los defectos del tubo neural. Por tanto, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) recomiendan ingerir 400 microgramos de ácido fólico diariamente, preferiblemente, desde un mes antes de quedar embarazada y a lo largo de los primeros tres meses.

El informe de March of Dimes de 2022, calificó a Puerto Rico con una clasificación “F”, por el aumento en las tasas de nacimientos prematuros. Los datos coinciden con el doctor Serrano en señalar como factores de riesgo el estatus socioeconómico y la falta de ampliación en la cobertura del servicio que permita mejorar la calidad perinatal.

Cabe señalar, que existen diversos tratamientos para el control y la prevención de partos prematuros. Llama a tu profesional de la salud, si presentas un solo síntoma de los mencionados.

La autora es periodista colaboradora de Suplementos.