Si Estados Unidos quisiera cambiar el ELA, hubiera concedido la independencia o condiciona la asignación de fondos federales al voto por la estadidad, escribe Jay Fonseca
Si Estados Unidos quisiera cambiar el ELA, hubiera concedido la independencia o condiciona la asignación de fondos federales al voto por la estadidad, escribe Jay Fonseca
Cuando Adolfo Hitler escuchaba las bombas de los rusos, ya Estados Unidos había negociado el nuevo orden mundial. Ocurrió el pacto Bretton-Woods. En esos tiempos comenzó la independencia de las colonias, se formó Israel y se fundó el Estado Libre Asociado (ELA). El pacto internacional fue que, en vez de pagar cuotas por haber perdido, como durante la Primera Guerra Mundial, ahora impulsarían libre comercio, productos fabricados en Norteamérica y Estados Unidos proveería la seguridad de transbordo comercial y militar.
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