Los políticos tradicionales nos han acostumbrado a que la forma de ganar es demostrando que el otro es peor que él, escribe Silverio Pérez
Los políticos tradicionales nos han acostumbrado a que la forma de ganar es demostrando que el otro es peor que él, escribe Silverio Pérez
Vivimos en una cultura en la que se nos enseña que para ganar debes hacer que alguien pierda. Sin embargo, los resultados demuestran todo lo contrario. Solo ganamos cuando todes ganamos. Paréntesis. Si alguien no entiende el “todes”, puedo comprenderlo. Lo uso para darle voz a aquellos que no necesariamente se identifican con la palabra todos y todas. Estoy en proceso de aprendizaje del lenguaje inclusivo. Pero, para el fluir de la columna, y para que ganen con la lectura quienes no estén familiarizados con este lenguaje inclusivo, no lo voy a aplicar en todas las instancias en que lo podría usar. Dejando claro ese punto, vamos a ponerle la lupa a ese ganar-perder de nuestra sociedad para ver si, de a poco, comenzamos a cambiar ese paradigma.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: